Setas mexicanas por primera vez

Hace mucho tiempo que querГ­a probar Hongos AlucinГіgenos , pues siempre habГ­a tenido la enorme curiosidad de saber quГ© experimentarГ­a o cГіmo me sentirГ­a. HabГ­a comentado a muchos amigos esta idea que rondaba mi cabeza, y varios de ellos se interesaron tambiГ©n. Tanto, que un buen dГ­a una amiga dГ­a me dijo que tenГ­a en su poder unas cuantas setas y que querГ­a probarlas en mi compaГ±Г­a. Estuve excitado durante dГ­as con la mera idea.
Antes que nada tengo que decir que mi Гєnico contacto con plantas psicoactivas antes de los hongos mГЎgicos (aunque tГ©cnicamente no son plantas, claro) habГ­a sido la Marihuana , que consumo ocasionalmente para regocijo de mis sentidos.

Setas Mexicanas
Lo que mi amiga Lucy tenía eran unas setas “mexicanas” (Psilocybe Cubensis Mazastapec para ser más exactos), en una cantidad de aproximadamente 2,5 gramos para cada uno. También debería mencionar que debido a la decisión de probar las setas tarde o temprano, estuve investigando muchísimo: cultivo, efectos, experiencias, usos espirituales y lúdicos, etc. En definitiva, casi todo lo que pude encontrar por internet acerca de este tema tan interesante.
Decidimos que lo mejor era irnos un día completo a un lugar con algo más de naturaleza, ya que ambos vivimos en el centro de una ciudad. Por lo tanto elegimos un día sin obligaciones, preparamos un buen desayuno, y luego de unas tres horas sin probar ni un solo bocado más y a la sombra de unas cuantas palmeras en un parque frente al Mediterráneo nos comimos tres cuartas partes de las setas junto con unas buenas onzas de chocolate negro. Y la verdad es que tenían mejor sabor del que me había imaginado… pero por imaginar, mejor lo que vino después.
Luego de unos 45 minutos empezamos a caminar y terminamos sentados en una zona con abundante cГ©sped al lado de un pequeГ±o estanque artificial que formaba parte de una red mГЎs extensa de riachuelos que recorrГ­an todo el parque. No pasГі mucho tiempo (quizГЎ una hora desde la ingesta) hasta que supe que algo me estaba pasando realmente. Me metГ­ al estanque sin pensarlo demasiado. El agua me llegaba a las rodillas y tenГ­a la sensaciГіn de que todo iba muy lento, y quizГЎs por esa razГіn yo interpretaba que tambiГ©n debГ­a moverme lentamente, y asГ­ como lo sentГ­, empecГ© a hacerlo.
Mientras daba vueltas por el estanque lentamente sentГ­ escalofrГ­os que me recorrГ­an todo el cuerpo, empezando por la nuca y llegando hasta mis manos y pies. No pude evitar comentarle a Lucy lo bien y relajado que me sentГ­a, aunque luego me di cuenta de que eso era sГіlo el principio.

Minutos más tarde y ya sin la sensación anterior de que algo me recorría el cuerpo entero, noté con incredulidad algo que no había visto antes: el fondo del estanque estaba hecho con baldosas que formaban alguna clase de dibujo geométrico. Enseguida me pregunté “¿Cómo puede ser que no lo haya visto antes, si llevo caminando un cuarto de hora por el estanque?” Por unos segundos intente remover el sedimento del fondo para observar aquella nimiedad que me llamó la atención, sin pensar que sería el detonante de todo lo que vino inmediatamente después.
No podía creer lo que estaba viendo, ¡y además con los ojos bien abiertos! Por fin descubrí lo que se experimentaba al descubrir cosas que no están ahí (o quizás siempre estuvieron, ahora tengo mis dudas). Enseguida pensé que había ingerido sustancias alucinógenas, y que ver cosas “raras” era totalmente normal, pero ese pensamiento tan racional no fue en absoluto suficiente para dejar de sentirme maravillado por las cosas que estaba viendo. Estaba totalmente fascinado por el simple hecho de verlas, tocarlas, acercarme y ver qué eran o de qué estaban hechas. Era evidente de que la explicación de que estaba viendo cosas por haber consumido cierta sustancia no era ni mucho menos suficiente para saciar la enorme curiosidad que me despertó en aquel momento, mientras pensaba en cuan increíble era que sucedieran tales cosas.
Los dibujos geomГ©tricos avanzaban lentamente hacia mГ­ y me rodeaban, pero nunca me alcanzaban y me seguГ­an mientras caminaba por el agua. Llegado algГєn momento (ВїHabrГ­an pasado apenas segundos o largos minutos? La respuesta no la sГ©) tuve la sensaciГіn de que los dibujos no estaban en el suelo como habГ­a pensado al principio, y entonces me acerquГ© a la superficie del agua para observarlos con detenimiento. La sorpresa fue que parecГ­an formar un todo Гєnico, pero a la vez estaban en el fondo, a media altura y por encima del agua, una percepciГіn muy difГ­cil de explicar. Cuando reparГ© este hecho (y a esta altura totalmente fascinado) los dibujos geomГ©tricos (eran algo asГ­ como flores muy complejas) empezaron a hacerse mГЎs complejos y algo asГ­ como unas serpentinas mГЎs oscuras que el agua empezaron a moverse en diferentes direcciones y a entrelazarse para formar dibujos (esta vez tridimensionales) cada vez mГЎs intrincados. Todo estas figuras me recordaban a plantas y vegetales, aunque no eran eso exactamente, pero es lo mГЎs parecido que se me ocurre para describirlas.

En este punto ya había perdido el contacto con la realidad y estaba absorto intentando tomar alguna de esas fascinantes formas que me envolvían ya como si se tratase de una neblina esculpida con miles de formas. Me movía muy lentamente y algo que parecía tener tallo y flor iba “creciendo” hacia mí hasta que pude tomarla con mi mano izquierda y subirla lentamente para observarla más de cerca y darme cuenta de que sus partes más pequeñas estaban formadas por más “serpentinas de niebla” más pequeñas y que los detalles eran formas más complejas aún e independientes de la parte mayor (algo así como sucede con los fractales).
Volví un poco a la realidad cuando me giré y vi a mi amiga sonriéndome a unos cuantos metros de distancia. Le dije “Lucy, estoy definitivamente viendo cosas”, ella simplemente me sonrió aún más si cabe y me contestó “Está más que claro que estás viendo algo”. Hablamos unos instantes y ella me comentó que se sentía muy bien y relajada, pero que era obvio que yo veía algo más por la cara de incredulidad que tenía.
Al salir del agua dejГ© de ver los dibujos y serpentinas para sentir que el pasto estaba suave como nunca y que todo era simplemente maravilloso. Todo estaba en una armonГ­a la cual hubiese sido un pecado alterarla, y debido a eso mis movimientos seguГ­an siendo muy lentos al igual que mi percepciГіn de la actividad que habГ­a a mi alrededor.
AlcГ© la vista hacia los ГЎrboles, en direcciГіn al mar. Los contrastes entre el cielo mГЎs azul que vi en mi vida, el mar mГЎs irreal y el verde mГЎs definido me sorprendieron gratamente. Todo estaba claro y nГ­tido, y ademГЎs era maravilloso.

Me acerquГ© al agua para comprobar que mis flores seguГ­an allГ­ y acto seguido me tirГ© en el pasto mГЎs confortable del mundo para regocijarme en el Г©xtasis que sentГ­a. El relax no me durГі mГЎs que unos segundos pues las grandes superficies (como el suelo y troncos de ГЎrboles grandes) empezaron a inflarse lentamente y a volver a su lugar repetidamente, todos a la vez.
Yo ya no encontraba palabras para contarle a mi amiga lo que me pasaba. “El suelo respira” le decía, “es increíble, cierro los ojos, los abro y todo sigue respirando lentamente, sin ninguna pausa”.
Setas Mexicanas

En ese momento unas pequeГ±as nubes comenzaron a cubrir el intenso cielo azul. No tuve mГЎs que mirar hacia arriba durante medio segundo para que en el cielo empezara a proyectarse una danza de nubes que llegarГ­a a cubrir toda la cГєpula que alcanzaba mi vista, en todas las direcciones y con una nitidez que no me dejaba mГЎs remedio que aceptar que estaba despierto y con total conciencia de lo que ocurrГ­a.
Algo similar a lo que habГ­a visto en el estanque empezГі a formarse a partir de las nubes, pero esta vez a escala gigantesca. Una enorme flor con infinidad de puntas se ubicГі en un lugar central mientras cientos de patrones similares rellenaban los alrededores. Seguidamente, otra vez las serpentinas, aunque esta vez parecГ­an hechas de nubes y salГ­an de diferentes direcciones para caer hacia la tierra lentamente. Varias serpentinas salГ­an del centro de la flor, a modo de estambres y se entrelazaban entre sГ­ mientras se movГ­an hacia mГ­. Y no hay ni que decirlo, formaban un conjunto sencillamente espectacular. Todo era muy dinГЎmico, y aunque era lento nunca habГ­a nada en reposo. La visiГіn tenГ­a muchГ­simos detalles, y no se veГ­a como un dibujo plano sino como una escultura de nubes con volumen, con sus elementos a diferentes niveles y distancias.
De repente me di cuenta de que le estaba hablando mentalmente a esa flor que ocupaba el lugar mГЎs grande del cielo, cosa que no me pareciГі en absoluto ridГ­cula, sino hasta necesaria. Yo le planteaba cosas como que estaba muy lejos, que se acercara porque querГ­a estar ahГ­ en medio de eso que parecГ­a tan fantГЎstico y hermoso. La respuesta era que siempre estarГ­a yo allГ­, que sus flujos serpenteantes llegaban a todos lados y lo impregnaban todo; y yo, por supuesto, le creГ­. ВїQuiГ©n le dice que no a una flor hecha de nubes con conciencia propia y con el poder de mantener todo aquello a la vez en orden y en movimiento?

DespuГ©s de ver aquella imagen, que de por cierto fue lo mГЎs impactante de todo, sentГ­ que los ГЎrboles me llamaban y tuve la necesidad de ir a ver que necesitaban, aunque simplemente parecГ­an llamarme para dejarme fascinado con el mГЎs mГ­nimo detalle que encontraba en sus hojas, su corteza, su olor, su tacto y mil cosas mГЎs que ni siquiera tienen un nombre definido en nuestro vocabulario. Llegados a este punto mi amiga estaba jugando con algo que yo no tenГ­a el placer de ver, y decidimos dar una vuelta por el parque. AsГ­ pasГі un buen rato (era por la tarde), con mi conciencia caminando por el filo de la realidad. De a momentos volvГ­a para comentarle algo a mi amiga (le contaba cosas que no podГ­a creer) y luego estaba otra vez en ese mundo mГЎgico donde todo parecГ­a tener algo que ofrecerme. Llegados a este punto tendrГ­a que decir que aunque realmente vi muchas cosas que efectivamente no estaban allГ­, todo parecГ­a formarse a partir de elementos que sГ­ estaban, nada de duendes ni dragones.
Mientras Lucy actuaba de guardiana de la naturaleza, olГ­a cuanta flor se cruzase en su camino y comprobaba la textura de cada planta que veГ­a, yo sentГ­ un fuerte deseo de ponerme debajo de una cascada, para ver como miles y miles de gotitas individuales me golpeaban la cara a la vez que yo me fundГ­a con ellas. No tenГ­a la sensaciГіn de que el agua estaba a una temperatura agradable para mi cuerpo, sino de que yo estaba a una temperatura agradable para el agua; no podГ­a decidir si admirar la grandeza de un ГЎrbol o formar parte de esa grandeza con mi propio cuerpo y energГ­a.
Las sensaciones se repitieron durante horas: todo era muy suave, todo iba muy lento, todo estaba en sintonГ­a con todo lo demГЎs y cualquier detalle era suficiente para que sintiera empatГ­a por ese elemento/ГЎrbol/insecto o lo que fuese. Cuando me quedaba quieto las formas del suelo o cualquier detalle eran suficientes para sentir que los patrones se volvГ­an a unir y que me rodeaban sin alcanzarme nunca. En ningГєn momento me sentГ­ asustado o lo pasГ© mal (ni psicolГіgicamente ni fГ­sicamente), mГЎs bien todo lo contrario, habГ­a descubierto una perspectiva totalmente nueva que nunca se me habГ­a presentado y que estaba disfrutando como nunca, a la vez asombrado y superado por todas las cosas que sentГ­a. Era de verdad muy agradable.
Ya a la tardecita decidimos comer el cuarto de setas que habíamos dejado. Ya para este momento no tenía visiones (habían pasado unas cuatro o cinco horas desde la primera ingesta), sino que me sentía parte de todo lo que estaba viendo, tocando y sintiendo. Estuve un rato intentando explicar a Lucy lo que sentía y había visto, pero me era muy difícil, sentía que no lo había “procesado” aún, que tenía mucha información y no sabía como exponerla.

Luego de un rato parece que las setas restantes hicieron su efecto y las superficies empezaron a respirar otra vez, aunque esta vez de una manera mucho mГЎs sutil. Otra vez empecГ© a explorar y sentir todo lo que veГ­a a mi alrededor, esta vez de una manera mucho mГЎs comunicativa con mi amiga, ya que no habГ­a muchas visiones que desviaran mi atenciГіn. PodrГ­a decir que a medida que se relajaban las visiones podГ­a sentir con mГЎs fuerza las emociones y sentimientos.
Setas Mexicanas
Sentía con un regocijo incalculable y tenía la sensación de que todo era perfecto, que ni siquiera valía la pena plantearse los problemas, se sentía todo tan lejano…
Luego de unas siete horas de la primera ración, ya me sentía mucho más “terrenal”, aunque las sensaciones de bienestar y de lentitud perduraban. Al volver a la ciudad sentía que flotaba y disfrutaba del viento como nunca.
Aunque no habГ­a comido demasiado no sentГ­a hambre, sГіlo sentГ­a que todo era genial y que todo seguГ­a su curso con una perfecciГіn admirable. Esa misma noche me seguГ­a sintiendo maravillosamente, con la particularidad de que no querГ­a estar en lugares agobiantes, o con mucha gente o ruidos, simplemente querГ­a que todo fuese al ritmo que yo sentГ­a en mi interior: lento y suave.
Al levantarme al dГ­a siguiente seguГ­a teniendo sensaciones reconocibles que me habГ­an nacido ya casi 24 horas antes, y el bienestar continuaba.

Finalmente mi amiga no pudo sentir los efectos con la intensidad que los sentГ­ yo, y probablemente tendrГ­a que haber comido una raciГіn algo mayor. Debido a que yo estoy empeГ±ado en que sienta algo parecido, sumado a que un amigo se quedo maravillado con la historia, estamos intentando cultivar nuestros propios hongos para hacer otra incursiГіn en ese estado tan increГ­ble.
Sin ninguna duda lo recomiendo a todo el mundo, siempre y cuando se estГ© al tanto de que no es una experiencia para nada ordinaria, pero aГєn asГ­ increГ­ble y asombrosa.
DГ­as despuГ©s intentГ© dibujar lo que vi, pero soy un desastre con el lГЎpiz en la mano, por eso creo que este escrito es la mejor manera de expresar mi experiencia, aunque esto es sГіlo un resumen, pues tarde o temprano me quedarГ­a sin papel por contar todo lo que sentГ­, aunque creo que a partir de cierto punto directamente me quedarГ­a sin palabras. ВЎBuen viaje!

Setas Mexicanas